Leonardo Villar, gerente general del Emisor, dijo que la actividad económica continúa desacelerándose, pero a un ritmo inferior al previsto. “El indicador de seguimiento a la economía (ISE) registró una variación anual de 5,8% en enero y de 3,1% en febrero. El pronóstico de crecimiento del PIB para 2023 aumentó al 1%”.

Dijo que la inflación anual en marzo se mantuvo relativamente estable, por la reducción de la inflación de alimentos, que entre febrero y marzo pasó de 24,1% a 21,8%. Los servicios han seguido presionando la inflación al alza, lo cual se reflejó en un incremento de 47 puntos básicos de la inflación básica sin alimentos ni regulados en marzo.

Las expectativas de inflación están por encima de la meta. Las expectativas a 12 meses reportadas en la Encuesta Mensual de Expectativas disminuyeron de 7,2% a 7,0%, y para fines de 2024 se mantuvieron en 5,0% en la mediana de la muestra.

El déficit de la cuenta corriente se reduciría del 6,2% del PIB registrado en 2022 hacia un estimado de 4,1% a fines de 2023, principalmente como resultado de una menor demanda interna, que se refleja en una caída de las importaciones.

La Junta destacó la evaluación favorable de Colombia en el Artículo IV del FMI y la más reciente ratificación de que el país cumple con las condiciones de acceso a la Línea de Crédito Flexible, disponible únicamente para países con sólidos marcos de política macroeconómica.

Ocampo agradeció el ambiente de cordialidad de los miembros de la Junta, de los que dijo que “en algunos momentos hubo diferencias de opinión, acuerdos en otros, pero siempre ambiente de trabajo entre el Banco de la República y el Ministerio de Hacienda para expresar lo mejor de la política económica”.

Dijo que es optimista de que el PIB crezca este año cerca del 2% y destacó los datos de desempleo y empleo, pues en el primero hubo una caída y en el segundo crecimiento.
En materia de inflación dijo que hay indicadores positivos, aunque otros generan preocupación y por eso la decisión de política monetaria de subir las tasas.

“Vamos a ver el resultado de abril y estoy esperanzado que sea positivo. Las expectativas ya reflejan a la baja la inflación”, aseguró.

Llamado al sucesor: Ocampo indicó que su principal éxito fue generar confianza en la política económica ante los mercados nacionales e internacionales y agregó que queda pendiente el debate en el Congreso de la República del Plan de Desarrollo y la adición presupuestal.

Sobre esto dijo que vendrá con un debate posterior y con el elemento que permitirá recursos importantes para el programa de subsidios de vivienda, tras la caída que registra el sector.

“Ojalá mi sucesor siga la línea de generar confianza en la política económica del gobierno y de respeto a la regla fiscal. Él ya ha expresado eso y espero que se ratifique en las acciones que vienen”, dijo.

Villar aclaró que es imposible decir si el alza es el final de ciclo, “pues las decisiones posteriores dependen de la información del momento, pero ya de manera más contundente la inflación va a empezar a bajar y si eso se produce y las expectativas se mueven hacia allá va a ser posible frenar el aumento de tasas”.

Para Villar, hay una desaceleración de la actividad económica y en especial la demanda. “La caída se siente más en unos sectores que en otros e incluso hay algunos que se ven beneficiados, como las remesas, que se ven favorecidas por la tasa de cambio que hace que eso se convierta en más pesos y los ingresos ayuden a mantener la actividad en las regiones donde viven quienes las reciben”, dijo.

Alejandro Reyes, de BBVA Reseach, dijo que “la decisión de la Junta estuvo en línea con nuestra expectativa y reconocemos en la decisión dividida una señal que nos aproxima al final del ciclo alcista de las tasas de interés”.

Y consideró que todavía algunos factores de riesgo que "pueden causar algo de división en la Junta, tales como los riesgos sobre la inflación producto de las restricciones en temas de transporte y climáticos”.

María Alejandra Martínez, directora de Investigaciones Económicas de Acciones & Valores, dijo que “todavía hay presiones en la inflación subyacente, de modo que hacia adelante el ritmo de corrección de esta podría ser mucho más lento que la inflación total”.

Tras 19 meses, la tasa de usura en mayo bajará

Luego de 19 meses (octubre de 2021) en los que la tasa de usura –el interés máximo que pueden cobrar los bancos en créditos de consumo– venía subiendo, para mayo caerá.

En abril la tasa es de 47,09% y en mayo bajará hasta 45,41%, es decir, una caída de 1,68 puntos porcentuales.

La Superintendencia Financiera certificó el Interés Bancario Corriente efectivo anual para la modalidad de crédito de consumo y ordinario para mayo en 30,27%, una caída de 112 puntos básicos (1,12 puntos porcentuales) frente a la anterior certificación (31,39%).

Durante este periodo de alzas en la tasa de usura se ha presentado una variación de 21,47 puntos porcentuales.

Analistas consideran que esta variación recoge plenamente la decisión de los bancos que a mediados de marzo bajaron las tasas de las tarjetas de créditos en sus segmentos de hasta $4 millones en cupos, aunque otros lo hicieron para la totalidad de sus plásticos. 

Bibliografía: https://www.portafolio.co/economia/finanzas/banco-de-la-republica-subio-su-proyeccion-del-pib-y-aumento-las-tasas-de-interes-582164